Cuando sientes que la mano de la muerte se posa sobre el hombro, la vida se ve iluminada de otra manera y descubres en ti misma cosas maravillosas que apenas sospechabas. ISABEL ALLENDE.







lunes, 19 de octubre de 2009

Enjuagué mis lágrimas con tu recuerdo.


Mire al cielo y me enoje con él.
Mire a la luna y sentí celos.
Mire el firmamento, y lloraba.
Enjuagué mis lágrimas con tu recuerdo.

Busque tu rostro entre las estrellas,
Busque tu risa en mis sueños.
Busque en mis versos un consuelo.
Enjuagué mis lágrimas con tu recuerdo.

Volví con mi mente al paraíso,
Volví a los días de sol,
Volví a las noches de estrellas,
Enjuagué mis lágrimas con tu recuerdo.

Florece de repente la primavera,
Florece el último momento que pasamos juntos,
Florece un cerezo latente,
Enjuagado, con las lágrimas de un recuerdo.






"un angel tirita encogido, acaba de nacer"

No hay comentarios:

Publicar un comentario